El “Laboratorio para la agricultura en el desierto” continúa robusteciéndose en la región de Antofagasta. A los centros productivos de Altos La Portada en Antofagasta y los pequeños productores agropecuarios de Taltal, en la costa, en el interior la labor para preservar esta actividad ancestral continúa. Así lo demuestra el inicio de tramitación para la compra definitiva que lleva adelante la comunidad atacameña de Cucuter para adquirir 60 hectáreas de terrenos y desarrollar en ellos proyectos agrícolas.
Así lo informaron el secretario regional ministerial (seremi) de Agricultura de la región de Antofagasta, Gerardo Castro; el director nacional de la Corporación Nacional de desarrollo indígena (Conadi), Ignacio Malig; el presidente de la comunidad atacameña, Manuel Salvatierra; y el consejero nacional indígena, Wilson Reyes.
De acuerdo con las autoridades y representantes de la comunidad, se trata de un proceso de compra de tierras que se ha llevado adelante por un periodo de casi seis años y que con el inicio del proceso de compra definitiva a la comunidad atacameña de Cucuter con cerca de 60 hectáreas de terreno para el desarrollo y preservación de una actividad cultural ancestral de los pueblos originarios de la región, la agricultura.
“Esto es similar a la postura de una primera piedra de una gran obra. Con esto se inicia el proceso para la adquisición por parte de la comunidad de Cucuter de estos terrenos. Este proceso incluye los trámites propios de una operación de este tipo. Uno de los aspectos relevantes es que, con esta compra de terrenos, la comunidad atacameña podrá desarrollar en ellos proyectos de carácter agrícola y de esta manera continuar preservando una tradición ancestral de nuestros pueblos originarios. Y cómo no, también analizar las alternativas para poder entregar un valor de nicho a sus productos, que va en la línea del proyecto impulsado por quien les habla y que busca nombrar a las comunidades del desierto de nuestra región con la categorización de Sistema Importante para el Patrimonio Alimenticio Mundial, Sipam”, destacó Gerardo Castro.
Por su parte el presidente de la comunidad atacameña de Cucuter, Manuel Salvatierra, relevó que esto marca un hito en el proceso de compra de estas tierras para sus representados.
“Hoy se concreta parte de un sueño que estamos viviendo hace seis años, tras un proyecto que tenemos como comunidad para reactivar la agricultura y el desarrollo de esta en el territorio de Atacama La Grande. Nuestros sueños se enmarcan en acciones propias que hemos heredados de nuestros antepasados, de nuestros abuelos. Gracias al apoyo del seremi de Agricultura y al director nacional de Conadi, que a través del Fondo de Tierras y Aguas hemos podido levantar nuestros sueños”, comentó el presidente de la comunidad atacameña.
Al respecto, el director nacional de Conadi destacó lo que significa este hecho tanto para la institución que él lidera como para la comunidad beneficiada.
“Hemos escuchado lo que nos han comentado acá sus dirigentes y la comunidad de la importancia que tiene el apoyo que el gobierno del Presidente Piñera les entrega. Hemos visto como a través de proyectos de Conadi han obtenido el agua y así poder regar las tierras en este implacable desierto. Esto impresiona, sobre todo a uno que es del sur, ver como logran producir en medio del desierto, ver como han levantado su cede y cuentan con la maquinaria y está trabajando una agricultura con pertinencia cultural”, destacó Ignacio Malig.
En este sentido, la concejal de la comuna de San Pedro de Atacama, Marcela Ramos, relevó el actuar de la comunidad para poder gestionar e interceder ante las autoridades correspondientes y lograr así buenos resultados, como este proceso de compra venta de tierras con fines agrícolas.
“La comunidad atacameña de Cucuter ha sido gestora y promotora de todo esto. Así también el servicio público a través de a Conadi y por sobre todo hay que destacar al seremi de Agricultura actual, que ha sido un apoyo fundamental. Hemos trabajado de la mano con él. Ha sido un arduo trabajo de muchos años y creo que hemos estado trabajando firmes y hemos sido rigurosos en seguir los procedimientos, hemos cumplido con todas las reglas y hemos tenido paciencia sobre todo y ahora esto es el fruto que está próximo a concretarse”, resaltó Marcela Ramos.
Bajo este escenario, para el consejero nacional indígena, Wilson Reyes, se trata de otro hito importante dentro de varios con los que cuenta la gestión entre el gobierno y este pueblo originario de la región de Antofagasta.
“El comienzo de la tramitación final de la compra de estos terrenos con fines agrícolas fortalece a la comunidad y da un punto de inflexión importante para el desarrollo productivo agrícola especialmente de la comunidad de Cucuter. No debemos olvidar que este proceso se inicia por una demanda de la comunidad. Oportunidad en la que, como consejero, iniciamos un proceso con la Conadi, proceso de un sueño que está muy cerca de convertirse en realidad”, concluyó Wilson Reyes.