Columna de opinión de la Seremi de Agricultura del Maule, carolina Torres, publicada en suplemento agrícola Agrocentro del lunes 28 de enero de 2019.-
Esta semana viviremos un nuevo recambio de veraneantes que comienzan sus vacaciones en febrero y esperamos que muchos turistas puedan visitar nuestra región, en especial, nuestras reservas nacionales y Parque Nacional Radal Siete Tazas.
El Maule recibió el año pasado 156.000 visitantes, donde el Parque Nacional concentró el 65% de esa visitación y le siguieron Altos de Lircay, Laguna Torca y Federico Albert. Estamos muy contentos además porque a contar de esta temporada, los adultos mayores tendrán acceso gratuito durante todo el año a las unidades del SNASPE administrado por CONAF, y por ello esperamos aumentar todavía más el número de visitantes.
La presencia masiva de turistas implica una importante activación de las economías locales y trae beneficios interesantes, por ejemplo, para nuestros pequeños agricultores que cuentan con servicios de turismo rural. Sin embargo, esta época veraniega también obliga a redoblar las medidas de prevención y de vigilancia del territorio regional para evitar la ocurrencia de incendios forestales.
Y es que a la fecha, a pesar de todas las acciones de coordinación entre los organismos dedicados a enfrentar emergencias, la capacitación a las comunidades locales, y el aumento de recursos para prevención y combate, no podemos mostrar cifras positivas que reflejen un cambio de actitud en nuestra población.
En efecto, registramos un 30% más de incendios que en igual periodo de la temporada anterior dado que al 25 de enero, llevábamos en la región 426 incendios contra los 327 del año pasado a esta fecha. Si bien en términos de superficie, con 955 hectáreas afectadas, estábamos dentro del mismo rango que el periodo anterior, debemos seguir insistiendo en el mensaje de prevención.
En su casi totalidad los incendios son producto de la acción de las personas: por una colilla de cigarrillo o una fogata mal apagada, una quema agrícola en época no autorizada, o el uso de herramientas que generan chispas sin una adecuada preparación del área en que se va a trabajar.
La CONAF cuenta con un 30% más de recursos que la temporada anterior. De hecho, la semana pasada recibimos en Vichuquén al helicóptero Kamov KA-32 que realizó un vuelo de reconocimiento por nuestra costa y que se sumó así en total operatividad a la flota de 46 aeronaves a nivel nacional. Este moderno helicóptero con capacidad para lanzar 5.000 litros de agua será un importante apoyo para los brigadistas forestales. No obstante, nunca los recursos serán suficientes dada la crítica condición climática que estamos viviendo y al avance de la zona de interfaz urbano forestal que aumenta el nivel de vulnerabilidad tanto para los recursos naturales como para la población.
A dos años de la tragedia de Santa Olga y recordando que a mediados de enero CONAF rindió homenaje a sus 4 mártires del incendio de Las Cardillas, solo nos resta insistir en el llamado a la prevención porque el mejor incendio es aquel que no se produce. Chile lo debemos proteger todos, ese es nuestro llamado.