La iniciativa, que busca mejorar la competitividad del sector, beneficiará además, a agricultores y agricultoras de las regiones Metropolitana y O’Higgins, quienes enfrentaron una temporada compleja a causa de las variaciones del clima.  

Junto a más de 200 agricultores y agricultoras de Maule, el Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) lanzó en el Teatro Municipal de San Javier, el Programa de Fertilización Racional en Maíz, que busca apoyar el uso racional de fertilizantes y biofertilizantes en la siembra de este grano durante la temporada agrícola 2023-2024, con el objetivo de mejorar la competitividad sostenible del sector. 

El programa abarca las regiones Metropolitana, O’Higgins y Maule y contempla la entrega de un incentivo de hasta $250.000 (valor neto) por hectárea para quienes siembren maíz de grano, beneficiando de 2 hasta 5 hectáreas de superficie cultivada. El monto no podrá exceder la suma de $1.250.000 y las y los beneficiarios deberán cofinanciar el 10% del plan de inversión. 

Pueden participar de la iniciativa los productores y productoras de las citadas regiones que cuenten con una superficie cultivada igual o mayor a las 2 hectáreas –acreditado con una declaración jurada simple– y que hayan producido este grano en al menos dos de las últimas tres temporadas.  

La ceremonia, donde se entregaron incentivos a 369 pequeños agricultores y agricultoras de las agencias de área de Linares (201), San Javier (70), Talca (60) y San Clemente (38), por un total de $176.450.000, contó con la asistencia de la subsecretaria de Agricultura, Ignacia Fernández, la gobernadora del Maule, Cristina Bravo; el delegado presidencial regional, Humberto Aqueveque, y el director nacional de INDAP, Santiago Rojas, entre otras autoridades.  

“Llegamos hasta el Maule para entregar una buena noticia. Sabemos que la temporada 2022-2023 fue compleja para las y los pequeños productores de maíz y debido a eso nos hemos hecho cargo, pensando en soluciones a largo plazo. Como Ministerio de Agricultura estamos impulsando un programa de cultivos tradicionales, que va a permitir que el apoyo económico que entregamos hoy no sea el único, y en el marco de la Mesa del Maíz estamos trabajando para  facilitar la producción y venta del grano, mejorando su competitividad y fortaleciendo a la pequeña agricultura”, señaló la subsecretaria Ignacia Fernández, al dirigirse a las y los agricultores que estuvieron presentes durante la ceremonia.

El director nacional de INDAP, Santiago Rojas, en tanto, informó que ante los problemas de mercado que enfrenta el rubro, INDAP y Odepa han elaborado un Plan Estratégico que se entregará antes de fin de año, que considera líneas de trabajo que tienen que ver con mejores condiciones de acceso y transparencia, y adaptación y resiliencia ante el cambio climático, entre otros objetivos.  “A esto se suma –dijo Rojas– un seguro especial de cobertura de precios elaborado con Agroseguros, que permite contar con acceso a un incentivo económico no reembolsable que permitirá, en la próxima temporada, disminuir las incertidumbres y riesgos del mercado de esta actividad”.  

En el acto de entrega de los incentivos a las y los agricultores del Maule, Jorge Pardo, agricultor de San Javier, agradeció el apoyo y manifestó que “en los tiempos difíciles, cuando todo sube y la naturaleza juega malas pasadas, los beneficios de INDAP dan un salvavidas para mantener la actividad y seguir creciendo”.

Apoyo permanente

El maíz es uno de los cultivos tradicionales con más superficie a nivel nacional y la mayor proporción de quienes lo cultivan son pequeños productores, principalmente con régimen de tenencia de tierra como arrendatarios, lo que les hace más difícil ser competitivos en las condiciones que hoy enfrenta el rubro. Además, suele ser su principal fuente de ingresos. 

 A esto se agrega que la temporada pasada tuvieron varias complejidades: las altas temperaturas del verano hicieron que el cultivo madurara tempranamente, obteniendo menores rendimientos, y las tempranas y abundantes lluvias otoñales acotaron la ventana de cosecha, complicando el proceso de comercialización. 

Los estudios técnicos y comerciales del rubro demuestran que es necesario seguir apoyando a los pequeños maiceros en la siembra de la temporada agrícola 2023-2024, con el fin de financiar en parte la compra de fertilizantes o biofertilizantes y así cubrir las necesidades del cultivo y facilitar el proceso de producción y venta del grano.